Bananas Chiquita en las fincas: Todo sobre la sostenibilidad
Cuando compras un racimo de bananas Chiquita deliciosas y de alta calidad en el supermercado, puede ser difícil de imaginar que estas plantas están creciendo en nuestras fincas tropicales en Sur y Centroamérica. Pero es exactamente allí donde comienza nuestro viaje y nuestras fincas juegan un rol fundamental en nuestra emocionante historia de sostenibilidad. Démosle un vistazo a como nuestras deliciosas bananas comienzan su vida y como les damos el cuidado necesario.
Cuidando de nuestra tierra: Renovación
Como agricultores entendemos que para lograr cultivar las mejores y más dulces bananas ellas tienen que tener las condiciones de crecimiento ideales y muchos cuidados. En Chiquita nuestras fincas son el corazón de nuestro negocio – nuestro programa “Los empleados en el centro” ejecuta iniciativas para asegurar que nuestros empleados tienen el correcto entrenamiento y apoyo, que están saludables, seguros y motivados en su trabajo. Esto sienta las bases para nuestros programas de Renovación y Reingeniería, una de nuestras mayores prioridades pretende mejorar la eficiencia, aumentar el rendimiento y disminuir el impacto ambiental de manera sustentable y a su vez asegurar la mejor calidad posible para nuestras bananas.
El programa involucra mejorar nuestra tierra y suelo, cambios de la variedad de bananas, aumentar el número de plantas de banana que crecen en un solo sitio y mejorar la cobertura del cultivo. Esta es una parte importante de nuestra visión de sostenibilidad, aprovechando la tierra existente en vez de plantar nuevas áreas. Buscamos aumentar la producción en un 25% de esta manera. Nuestra meta es tener 76% de nuestra tierra renovada de esta manera para el 2022.
Agricultura para las futuras generaciones
Ya que estamos constantemente pensado en el futuro, planeamos de manera cuidadosa y optimizamos lo que ponemos en nuestra tierra, agua y agricultura además de planear para nuestros futuros trabajadores y salvaguardar el trabajo decente para todos – esto está todo detallado en nuestro Código Agrícola.
Nuestro programa de renovación nos ha dado la oportunidad de remover una tonelada de plástico por hectárea de tierra, una reliquia de un sistema pasado utilizado para el cultivo de bananas. Esto nos da la oportunidad de no solo mejorar nuestra tierra y la biodiversidad sino también la oportunidad de controlar que nuestra tierra tenga los nutrientes necesarios para producir fantásticas bananas.
Cultivos de Cobertura
Queremos limitar la erosión de la tierra y deshacernos de las pestes de la manera más natural posible, y una de las mejores maneras de hacerlo es plantar cultivos de cobertura. Se han desarrollado gran cantidad de pruebas para comprobar cual especie de plata funciona de la mejor manera y ahora las estamos implementando en nuestras granjas. Esto nos permite reducir la cantidad de herbicidas que utilizamos. Planeamos expandir estos cultivos a donde sea posible utilizarlos y para 2021 esperamos aproximadamente tener una cobertura de 65% de nuestra área.
Reducir nuestra huella hídrica
En Chiquita, sabemos que reducir la cantidad de agua que utilizamos es de suma importancia. Por ende, hemos basado nuestras estrategias y políticas de manejo de agua en los resultados de estudios independientes del Fondo Mundial para la Naturaleza, lo que nos permite mejorar significativamente nuestra huella hídrica.
La cantidad de agua que utilizamos varia drásticamente de país en país. En algunos lugares somos capaces de depender del agua de lluvia y nuestro programa de Renovación de Fincas nos ha ayudado a asegurar que la máxima cantidad de agua esté disponible. Sin embargo, en algunas áreas que experimentan época seca y debido a los efectos del cambio climático necesitamos de irrigación. Como parte de nuestro programa de renovación estamos invirtiendo en mini y micro irrigación y no utilizamos irrigación superior.
Disminuyendo el uso de químicos
Hacemos todo lo posible para evitar el uso de químicos al cultivar las bananas. Hemos reducido nuestro uso de químicos en muchas maneras, con rotación inteligente de cultivos, asegurando la salud de las plantas, defoliación preventiva (removiendo las hojas cuando se necesita), monitoreo de pestes, utilizando trampas e integrando la agricultura de precisión en el control de pestes.
Solo utilizamos los químicos cuando las pestes presentan un riesgo para el cultivo y se utilizan solo productos de uso aprobado y siguiendo de cerca las instrucciones del proveedor. Este proceso es monitoreado de cerca por muestra certificación en las fincas del Rainforest Alliance y Global Gap. De igual manera utilizamos los mejores métodos de aplicación posibles, horarios y rotamos los químicos para evitar la resistencia. Hemos logrado garantizar que el 92% de los productos que utilizamos sean de baja toxicidad.
Estrategias para el futuro
Actualmente estamos trabajando en estrategias de sostenibilidad para los siguientes 20 años y nuestras fincas tendrán un rol fundamental en ello. Estamos decididos a desempeñar nuestro papel en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible y los acuerdos internacionales establecidos en el Acuerdo Climático de París. Para hacer esto, hemos contraído tres compromisos principales.
Primer Compromiso: Cada finca es completamente individual, como una persona- diferente tierra, clima, geografía, personas, etc. Por ende, lo que hace a cada una lo más sustentable posible es diferente. Lo primero que pretendemos hacer es mapear áreas actuales y futuras donde cultivaremos nuestras bananas. Esto nos ayudará a identificar donde podemos colocar sistemas orgánicos de bajos insumos y además donde controles no biológicos sean la manera de permitir una agricultura comercialmente sostenible. El mapeo va a guiar nuestras inversiones.
Segundo Compromiso: Vamos a cultivar la mayor cantidad de bananas posible de manera orgánica, tomando nuestras habilidades, cuidado y enfoque en la calidad desarrollado a través de agricultura convencional y aplicando este enfoque de bajo impacto. De esta manera, nuestro objetivo es cultivar productos orgánicos y que estos estén disponibles y sean lo más asequibles posible.
Tercer compromiso: Donde no podamos evolucionar a la agricultura orgánica, utilizaremos las mejores prácticas agrícolas para minimizar la huella de carbono para lograr que el mundo mantenga el calentamiento global entre 2 grados. Monitorearemos y reportaremos el progreso cada año.
Cuando compras unas deliciosas y nutritivas bananas Chiquita, hay mucho que sucede más allá de las bananas amarillas que ves. Cuando compres un racimo de bananas Chiquita, estás trabajando junto a nosotros para alcanzar un futuro sustentable. ¡Muchas Gracias!
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